Este Shabat, la Jalá en forma de llave
Pesaj ha terminado, las cosas de Pesaj están guardadas.
Estamos firmemente de regreso en tiempo real y la casa huele a Jalá nuevamente.
Y esta semana no es una jalá cualquiera.
Las mujeres judías de antaño horneaban una jalá en forma de llave (o una llave horneada en la jalá, ¡elige!) en el Shabat después de Pesaj.
¡Cada año, como la “dama de jalá”, empiezo a recibir preguntas sobre esta costumbre tan pronto como termina Pesaj! “¿Es esto algo real?” “¿Esto esta bien?” “¿De dónde vino esta costumbre?”
En primer lugar, te sorprenderá saber que, efectivamente, esta es una costumbre muy auténtica.
Los estudiantes del Maguid ya hablaban de esto como una “tradición antigua” y ofrecían numerosas interpretaciones.
Después de 40 años en el midbar, el pueblo judío continuó comiendo el “man” hasta el primer Pesaj en Eretz Israel. Trajeron la ofrenda del Omer el segundo día de pesaj y a partir de ese día ya no comieron Man, sino alimentos que habían crecido en Eretz Israel. Dado que en esta época del año es cuando comenzaron a preocuparse por su sustento en lugar de que cayera del cielo cada mañana, tocar la jalá nos recuerda que aún debemos mirar hacia arriba y recordar la Fuente de todo sustento, y rezar que las puertas del Parnasa debería abrirse para nosotros.
Eso significa que estos son los días en los que se decide cuán abundante será nuestra parnasá (es decir, sustento… masa) el próximo año.
Hay muchas tradiciones que se han desarrollado para corresponder con esta idea.
En Siria y Turquía, las mujeres esparcían granos en las esquinas de sus casas al final de Pesaj, los judíos de Marruecos celebraban “Mimouna” en Motzaé Pesaj, y en Europa del Este, las mujeres horneaban llaves en su jalá.
El sustento supremo es siempre una bendición de Hashem, y le pedimos que las puertas de se abran, Tu tesoro de bondad”, se abran de par en par para todos nosotros de la manera más hermosa posible.