Leilui Nishmat
El 27 de Ab es el aniversario de la desaparición física del Jajám Hagaón, Rab Itzjak Chehebar ZL . Que su recuerdo sea para Bendición y protección de todo Am Israel. Y que nosotros en este mundo hagamos acciones positivas en mérito de su Neshamá.
Biografía:
El Jajajm Itzjak Moshe Chehebar ZZ”L, nació en el año 1912 en la ciudad de Siria, Alepo. De cuna muy humilde Itzjak tuvo una infancia muy sufrida. A edad muy temprana perdió a su madre y su padre, Don Moshe, era un hombre forjado en el trabajo. Se preocupaba para que su hijo se consagrara desde pequeño al estudio de la Torá. El pequeño Itzjak amaba estudiar Torá por encima de todo, prefiriendo el estudio a cualquier diversión. Despuntaba así uno de sus rasgos característicos, ser constante y pertinaz. Itzjak tenía más luz que los demás, era un alumno calificado. Se sentaba entre grandes rabinos, llegaba a estudiar 18 horas diarias. A los 11 años ingresó a la Yeshiba Deguel HaTorá y a los 16 años empezó a ejercer su labor como maestro y por la noche a adultos.
En 1930 con 18 años fue designado director del Talmud Torá de Alepo teniendo a su cargo 700 alumnos menores de 12 años. Contrajo matrimonio a los 34 años con la señora Yamul (Camelia) Silvera. La familia Chehebar decidió viajar a Beirut para pasar la festividad de Rosh Hashaná y cuando la congregación sefaradí de Buenos Aires se enteró que estaba allí, no dudaron en invitarlo para que se haga cargo del rabinato.
El 22 de octubre de 1953 llegó a la Argentina y asumió el rol de guía de una comunidad perpleja y desorientada. Un grupo de personas criticaba su estricto desempeño, por lo tanto el Jajam renunció. Luego de unos días la comisión directiva le envió cartas diciendo que no lo dejarían renunciar y de esta manera regresó. Dio jerarquía a la profesión de Rabino. Tenía personalidad para imponer sus convicciones con grandeza y valentía.
El Jajam cumplió la función de pastor y guía de su rebaño. Gracias a su labor sin descanso, logró que la mayor parte de los miembros de la comunidad vuelvan a los caminos de la religión. Se ganó el respeto y la admiración. Se destacaba por su sabiduría, inteligencia, carisma, entre otras. Iba personalmente a visitar a los enfermos y también a gente de duelo. Fue padre de huérfanos y defensor de viudas. Fundó una escuela secundaria construido por iniciativa de Don Shaul Sutton. Enalteció la participación de las mujeres en la comunidad. En 1979 fundó la Yeshivá “Bet David”.
Escribió libros y su obra educativa mereció reconocimiento en todo el mundo judío por el alto nivel de pedagógico de sus centros de enseñanza y conocimiento de la Torá por sus alumnos. En 1983 recibió el premio Jerusalem por máxima distinción en la educación judía. El Jajam ZZ”L falleció el 17 de agosto de 1990 a los 78 años de edad.